Milagros, anomalías, criaturas inusuales: todo esto y mucho más atrae la atención humana. El hombre que no siente el frío, Wim Hof, un holandés, asombró al mundo con su extraordinaria habilidad para no sentir el frío. Su cuerpo no sufre ni experimenta ningún cambio debido a las temperaturas extremadamente bajas para el cuerpo humano. Incluso estableció nueve récords mundiales. En 2000, Wim Hof nadó 57,5 metros en 61 segundos.
A primera vista, nada sorprendente, pero si no se tiene en cuenta que este baño se realizó bajo el hielo de un lago helado en Finlandia. Siguiendo su tradición, solo vestía medias y calcetines abrigados. En 2006 conquistó el Mont Blanc vistiendo sólo pantalones cortos! Al año siguiente intentó hacer realidad el sueño de todo alpinista: el Everest, pero se lo impidió.. los dedos de los pies congelados, mientras volvía a escalar la montaña en ropa interior.
Sin embargo, no pierde la esperanza y la fe y continúa con sus intentos. En 2007, el hombre de hielo holandés sorprendió a todos al correr la mitad de la distancia de un maratón (21 km) descalzo en la nieve y vestido sólo con pantalones cortos. Su ruta cruzó el Círculo Polar en Finlandia, donde la temperatura de la nieve no superó los -35 grados. En 2008, Wim batió su propio récord al permanecer en un tubo transparente lleno de hielo.
Anteriormente había logrado permanecer allí unos 64 minutos. Ahora hay un nuevo récord mundial: 73 minutos! Para los científicos, el holandés sigue siendo un enigma sin resolver. Muchos creen que esta habilidad es innata en Wim, pero él mismo lo niega categóricamente. En muchas entrevistas, Hof afirma que esto es sólo el resultado de un intenso entrenamiento del cuerpo y del espíritu. Pero cuando le piden que revele el secreto del “Hombre de Hielo”, permanece en silencio.
Una vez, en una charla, incluso mencionó un vaso de Bacardí. Pero con el tiempo reveló el secreto de su éxito: lo cierto es que practica el sistema tántrico de Tummo, que nadie utiliza excepto los monjes. En cualquier caso, esta capacidad es el resultado de un entrenamiento prolongado, una resistencia y una fuerza interior que sólo pueden ser envidiadas y admiradas.